Costa Rica ostenta una belleza escénica impresionante y una extraordinaria riqueza en biodiversidad. Está estratégicamente situada en América Central, con costas en el Océano Atlántico y en el Océano Pacífico. Ubicada en una zona que cubre tan solo 51,100 kilómetros de superficie terrestre, Costa Rica posee aproximadamente el 6% de la biodiversidad del mundo. Un viaje a Costa Rica ofrece la oportunidad de visitar 12 diferentes zonas de vida, 20 parques nacionales, 26 áreas protegidas, 9 reservas forestales, 8 reservas biológicas y 7 santuarios de vida silvestre. Costa Rica es el lugar de nacimiento del ecoturismo. El país es citado a menudo como modelo para la conservación en armonía con el desarrollo comunitario y el crecimiento económico.

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Por lo tanto, no es coincidencia que la educación pública, gratuita y obligatoria, sin distinción entre los sexos, haya sido instituida desde 1869; o que la pena de muerte haya sido abolida desde 1877 (el tercer país que la abolió a nivel mundial). Costa Rica ha mantenido su posición abolicionista desde entonces y ha ratificado todos los instrumentos internacionales que defienden el derecho a la vida.

La participación de la mujer en la vida política es amplia. Desde 1996, Costa Rica ha avalado las cuotas femeninas en los cargos públicos y a nivel de representación política, como una acción afirmativa acorde con el principio democrático de igualdad presente en nuestra Constitución Política. Actualmente es la novena nación en el mundo con mayor cantidad de representantes femeninas en su Congreso.

Costa Rica presenta hoy un mosaico étnico y cultural que es producto de una fuerte influencia de diversas mezclas de grupos, costumbres y tradiciones, mediante las cuales se integran la cultura europea; las indígenas mesoamericanas y caribeña, propias de su ubicación geográfica; la africana, traída por los esclavos y por los trabajadores jamaiquinos atraídos por el trabajo en la construcción del ferrocarril y en las plantaciones bananera; las autóctonas; las de la pampa guanacasteca y la típica de los campesinos agricultores de la meseta central. Una reforma de 2015 al artículo 1 de la Constitución Política de la República de Costa Rica la declara “una República democrática, libre, independiente, multiétnica y pluricultural”.

Según la OCDE, para 2018 el número de inmigrantes registrados ascendía a un 9.1% de la población total, el más alto porcentaje de la región latinoamericana.

El “Good Country Index” de Simon Anholt colocó en 2018 a Costa Rica como el país de América Latina que más contribuye al bienestar mundial y en la posición número 34 de los 153 países en la lista.

El Poder Legislativo, de carácter unicameral, está constituido por 57 Diputados, elegidos por provincias. Sin embargo, tienen carácter nacional y gozan de inmunidades que aseguran su libertad de acción y su capacidad de oponerse críticamente al gobierno.  Los diputados no pueden ser reelegidos en forma sucesiva, sino en periodos alternos, y entre sus atribuciones más importantes además de elaborar las leyes figura la designación de los magistrados permanentes y suplentes de la Corte Suprema de Justicia, aprobar los convenios internacionales y establecer los impuestos y contribuciones nacionales.

El Poder Judicial tiene por función principal resolver definitivamente las causas sometidas a su conocimiento y ejecutar las resoluciones que pronuncie. La Constitución Política le otorga a este poder de la República una independencia total y absoluta, lo cual constituye una garantía de que en Costa Rica la justicia se imparte en forma transparente y estricto apego al espíritu de la ley. El área jurisdiccional del Poder Judicial está integrada por la Corte Suprema de Justicia, las Salas de Casación (Primera, Segunda y Tercera), los Tribunales, los Juzgados de Mayor y Menor Cuantía, el Consejo de la Judicatura y la Sala Constitucional. Esta última ejerce una función primordial en el sistema jurídico costarricense, pues es la encargada de proteger y conservar el principio de la Supremacía Constitucional. Su principal función es la de conocer y resolver asuntos de materia constitucional, por lo que las personas pueden recurrir ante la Sala mediante tres vías, a saber: el recurso de hábeas corpus, el recurso de amparo y la acción de inconstitucionalidad. Adicionalmente esta Sala conoce de las consultas legislativas y judiciales de constitucionalidad y del recurso de protección al derecho de respuesta.  

El Poder Judicial también engloba diversas instituciones auxiliares de la justicia, tales como el Ministerio Público, la Defensa Pública, la Escuela Judicial, el Organismo de Investigación Judicial (Policía Judicial), la Inspección Judicial y un Centro Electrónico de Información Jurisprudencial.

Además de los tres Poderes, y funcionando en conjunto, el sistema político cuenta con un Tribunal Supremo de Elecciones que constituye el órgano constitucional superior en materia electoral y, por lo tanto, es el responsable de la organización, dirección y vigilancia de los actos relativos al proceso electoral. Goza de independencia en el desempeño de su función y de él dependen el Registro Civil y las Juntas Electorales, lo cual garantiza la transparencia y pureza del sufragio electoral. Está integrado, ordinariamente por tres Magistrados propietarios y seis suplentes, nombrados por la Corte Suprema de Justicia.

También se ha desarrollado un notable fortalecimiento de la democracia en el área de los controles al ejercicio del poder y las garantías a los derechos de los ciudadanos. La creación de la Defensoría de los Habitantes, de la Comisión Nacional del Consumidor y de la Procuraduría del Ambiente; las audiencias sobre tarifas de servicios públicos abiertas por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos; la acción de la Procuraduría General de la República en la vigilancia del uso de los recursos públicos por parte de las agencias del Estado, así como el establecimiento de contralorías de servicios en muchas instituciones, brindan a los ciudadanos mayores posibilidades de defender sus intereses y los de sus comunidades.

El modelo costarricense de desarrollo se basa en el principio de desarrollo sostenible, que debe lograrse con equidad, integrando las tres dimensiones del desarrollo con la defensa de los derechos humanos, la igualdad de género y la corresponsabilidad intergeneracional.

Pese a que el territorio costarricense representa solo el 0,03% de la superficie global, contiene una de las mayores concentraciones de biodiversidad del planeta, con al menos un 5% de la diversidad biológica de la Tierra, lo que ha impulsado una política basada en la convivencia armoniosa con la naturaleza. Este compromiso se refleja en el hecho de que más del 25% de la superficie del país se encuentra sometida a algún tipo de protección estatal, junto con alrededor de un 8% en manos privadas. Costa Rica logró recuperar su cobertura forestal en una generación, pasando de menos de un 30% en los años ochenta hasta el 52% del territorio en la actualidad, con mecanismos fiscales innovadores y programas de pago por servicios ambientales.

El compromiso de Costa Rica con la protección del medio ambiente se hace patente también en la suscripción de numerosos tratados ambientales internacionales; en el establecimiento de nuevas instituciones en el sector (18 en los últimos 14 años) y en la promulgación de cuerpos normativos como la Ley Orgánica del Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) en 1993, la Ley del Ambiente en 1995, la Ley Forestal en 1996, la Ley de Biodiversidad en 1998 y reformas constitucionales con respecto a la protección y el aprovechamiento de los recursos naturales y el medio ambiente.

Costa Rica tiene también un fuerte compromiso con la protección del medio ambiente, ubicándose en el primer puesto de América Latina en cuanto a desempeño ambiental (Índice de Desempeño Ambiental, 2018).

Costa Rica tiene hoy una matriz eléctrica absolutamente renovable y se ha comprometido a mantener una capacidad instalada eléctrica renovable al 2030. El acceso a la electricidad es prácticamente universal, con una cobertura del 99% de la población del país. Durante los últimos 5 años, Costa Rica ha logrado proporcionar aproximadamente un 99% de la energía eléctrica en su territorio a partir de fuentes totalmente limpias y renovables (energía hidroeléctrica, solar, eólica y geotérmica).

Para un país del tamaño de Costa Rica, establecer fuertes lazos comerciales con el resto del mundo es un requisito para su prosperidad económica. Esto no es algo reciente, sino más bien una característica de la relación del país con el resto de mundo desde el siglo XIX, cuando se iniciaron las exportaciones de café. Uno de los pilares del desarrollo económico de Costa Rica ha sido abrir su economía, lo cual implica reducir aranceles, promocionar las exportaciones y atraer inversión extranjera directa.

Debido a su posición estratégica como puente entre América del Norte y Suramérica, Costa Rica es una plataforma hacia Norteamérica y el resto del mundo. Las empresas establecidas en Costa Rica tienen un acceso excepcional a los grandes mercados del mundo, representando 2,3 billones de personas y más del 68% del PIB a nivel mundial. Actualmente, Costa Rica tiene tratados de libre comercio vigentes con Colombia, Centroamérica, Canadá, los países del CARICOM, Chile, China, Corea, Estados Unidos, Panamá, República Dominicana, Perú y es parte de un Acuerdo de Asociación entre Centroamérica y la Unión Europea y un Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y México. Costa Rica es un miembro activo de la Organización Mundial del Comercio. 

Costa Rica ha logrado combinar con éxito el aumento del nivel de vida de su población con el uso sostenible de los recursos naturales. El compromiso de Costa Rica con el crecimiento económico y el desarrollo social ha impulsado su economía hacia la diversificación, la creación de fuertes sectores en manufactura avanzada, dispositivos médicos, servicios y turismo.

El ingreso per cápita de Costa Rica se duplicó en términos reales durante las últimas tres décadas y se ha alcanzado acceso casi universal a los servicios de salud, educación y pensiones. El PIB per capita de Costa Rica es hoy el cuarto más elevado en América Latina (2018). De igual forma, el Índice de Desarrollo Humano de los costarricenses es elevado (el cuarto en América Latina, según el Reporte de la Organización de las Naciones Unidas de 2018), y así lo demuestran la larga esperanza de vida al nacer, la baja tasa de pobreza y la percepción de satisfacción con la vida, que es una de las más altas del mundo y la más alta en América Latina.

Aunque las exportaciones agrícolas tradicionales de banano, café, azúcar y carne aún son importantes, el país ha sido muy exitoso en diversificar su producción y sus productos de exportación hacia bienes y servicios de mayor valor agregado y sectores específicos como el de alta tecnología y el ecoturismo: de hecho, desde hace varios años la tecnología biomédica se convirtió en el principal producto de exportación del país. El sector de servicios del país presenta actualmente el porcentaje de crecimiento más importante de todos los sectores productivos del país: grandes compañías como Amazon, Fujitsu y Sykes han establecido sus centros de servicio y sus “call centers” globales en Costa Rica, mientras que otras como Intel, Procter & Gamble y Bayer han establecido allí sus oficinas regionales y sus centros de consolidación de servicios (shared services).

Para más información, puede visitar el portal de la Agencia de Promoción de Inversión de Costa Rica (CINDE). Encontrará información específica de Costa Rica en temas de infraestructura, telecomunicaciones, educación, régimen de zonas francas, capital humano, requisitos de inmigración, parques industriales, principales indicadores económicos, regulaciones laborales, vida en Costa Rica, cómo establecer un negocio en el país, impuestos y acuerdos de libre comercio y acceso preferencial.

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